Bajo el convenio de la Universidad Autónoma de Occidente con la Fundación Carvajal, fue desplegada la experiencia «Programando y coloreando mi Ozobot: Parte 1» la cual se desarrolló con 31 estudiantes de grado tercero de la Institución Educativa Técnico Industrial Antonio José Camacho sede Olga Lucía Lloreda. Dicha experiencia tuvo como objetivo que los estudiantes lograrán entender que era un robot, sus funcionalidades básicas, para que sirve y todo lo relacionado con este tipo de tecnología, haciendo uso del Ozobot como medio para dicha tarea. Además programar el Ozobot mediante la codificación por colores.

El 27 de agosto del 2019, se realizó la primera sesión en la cuál fueron ejecutadas la fase 1 y 2: Mi Ozobot y yo. En dichas fases los estudiantes aprendieron sobre lo que es un robot y observaron vídeos con ejemplos de robots en diferentes contextos de aplicación. Además, conocieron lo que es un Ozobot, sus componentes y como funciona. También aprendieron a trazar rutas de forma correcta para que el Ozobot las interpretara y recorriera sin inconvenientes. En dicha actividad los estudiantes conectaron rutas predefinidas y aprendieron a dibujar esquinas y curvas. Por último, los estudiantes tuvieron un espacio en el cual crearon sus propias rutas de forma libre e independiente, con sus propios diseños y al final unificaron muchas de ellas para crear una “súper ruta” que los Ozobots recorrieron.

El 18 de spetiembre del 2019, se realizó la segunda sesión en la cual fue ejecutada la fase 3: Programando mi Ozobot. En dicha fase los estudiantes conocieron la forma mediante la cual se puede “hablar” con el Ozobot y enviar instrucciones para realizar tareas específicas, el lenguaje a través programación por colores. Además, se le plantean diferentes retos con los cuales se enseñaron conceptos necesarios para aprender a programar el Ozobot de forma correcta haciendo uso de la configuración de colores. Por ejemplo, se enseñó a los estudiantes que el orden de los colores es importante para que los robots interpreten de forma correcta lo que se desea que realice.

Para finalizar dicha sesión, los estudiantes recibieron una plantilla en la cuál debían aplicar los conocimientos adquiridos a lo largo de las dos sesiones con el fin de resolver de forma correcta una ruta haciendo uso de la codificación por colores. Dicha actividad consistió en entregar una plantilla con los códigos de colores y su símil o representación visual, para que el estudiante encontrara el código adecuado y completara la ruta que el Ozobot debía recorrer.

En conclusión, la actividad permitió generar motivación en los estudiantes ya que experimentaron con una nueva tecnología y querían saber todo lo relacionado con ella. También se evidencia que el uso de la tecnología como mediación  para generar experiencias  con los estudiantes fue relevante, dando como resultado final  un aprendizaje con propósito y significativo, generando curiosidad en los niños y  favoreciendo aprendizaje autónomo en el uso de recursos tecnológicos en este caso particular de los Ozobots

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